jueves, julio 09, 2009

amor

A menudo escucho a la gente decir:
“de amor no se ha muerto nadie”
lo pienso y no puedo
más que no estar de acuerdo.

Yo creo sinceramente
que uno puede,
morirse de amor, o
morir por un amor.

Acaso esos necios no han escuchado
de la ama de casa que encontró
la muerte
levantando un cesto de basura,
con la picadura de un alacrán,
o del anciano que al cruzar la calle
fue atropellado por un autobús,
o de aquel niño que falleció
por no tener agua que beber.

Y es que en esta vida
uno muere de todo,
y a veces;
uno muere de nada.
Cualquier motivo es bueno para morir,
La línea entre un estado y otro es;
Frágil, es endeble.

[yo tuve una vez un gato
que murió de tristeza]

Morir es destino de todo ser vivo,
luego entonces,
porqué negarle al amor ser la causa eficiente de la muerte
cuando es destino del ser
encontrar alguna vez
el amor
[según me dijo mi madre alguna vez].

Por que el que ama entrega su razón,
su cuerpo,sus lagrimas, sus risas,
el que ama entrega todo de sí
y luego:
cuando el amor se esconde,
cuando sale huyendo por la ventana,
Cuando te abandona sin más razón,
¿No se muere uno entonces?
peor aún:
cuando el amor no es correspondido,
todas esas causas son atenuantes
para culpar al amor de una
muerte
o que sé yo, tal vez,
declarar al amor,
como la única causa que
justifique la muerte.