domingo, junio 01, 2003

DE LAS COSAS QUE MAS EXTRAÑO DE ELLA...

Nadie, de los que a mi me conocen, podrá negar que todavía la amo, y que en mis días mas tristes es su recuerdo lo que me mantiene en animo, y bien podía yo decir muchas cosas, que aunque fuesen de lo mas trillado, aun así serían de lo mas sinceras, pero creo que por esta vez no diré mucho, pues soy hombre de pocas palabras cuando de las verdades se trata, pero diré lo que mas extraño de ella, solo por seguir en el juego de la enunciación.
1.- Su sonrisa, que siempre me consolaba, aun después de haber cometido un error, y que me aliviaba en un instante fugas. 2.- Sus brazos, que me envolvían para hacerme sentir querido, aun después de haber estado con otra mujer, pues ella siempre me lo dijo: “lo importante es nuestro momento, lo demás que se lo lleve el carájo”. 3.- Sus besos, que me transportaban a un estado nirvanico en donde parecía no haber tiempo ni espacio, y en donde todo se volvía esférico, cuasi-perfecto. Y esos delicados labios que me demostraban la posible existencia de un paraíso y que me hacían creer, al menos por un momento, que aun cabía algo de bondad dentro de mi.

Aunque pareciera paradójico, solo extraño esas tres cosas; sus besos, sus abrazos y su sonrisa, y ahora, finalmente, después de tantas cosas que han sucedido, me pregunto : ¿En verdad existió ella alguna vez? Existe, en dónde. El abismo ha tomado dimensiones extrañas, es: mi/ tu duda existencial, y te/ me extraño